Piedecuesta tiene un deseo: tener el primer presidente oriundo del pueblo, y está a un paso de conseguirlo pues el empresario Rodolfo Hernández podría imponerse este domingo en las urnas encumbrando a la tierra que lo vio nacer y hacerse rico, y en donde, irónicamente, apenas se ve propaganda política.
El pueblo de Hernández está en el departamento de Santander, el feudo rodolfista en el que el ingeniero logró hacerse millonario en el sector de la construcción y empezó sus correrías políticas, primero como concejal de su pueblo y luego como alcalde de Bucaramanga, la capital regional.